Barcelona. El presidente de CiU, Artur Mas, propuso ayer al resto de partidos políticos catalanes pactar un plan B si el Tribunal Constitucional (TC) tumba el Estatut. Las prioridades que propone CiU en ese caso son reclamar un concierto económico a la vasca para regir las relaciones entre Cataluña y el Estado y reclamar el traspaso de las competencias en materia de aeropuertos. Ante la aparente "inminencia" de la sentencia del TC, Mas hizo ayer un llamamiento en rueda de prensa al presidente de la Generalitat, José Montilla, para celebrar cuanto antes una cumbre catalana, en la que se pactaría un "plan de acción" de respuesta a un eventual recorte estatutario. Además y en un último intento por frenar una sentencia contra el Estatut, Mas pidió a los miembros del TC que "se inhiban" y renuncien a emitir un fallo.
Si finalmente éste se produce y, como se espera, cuestiona el texto aprobado por las Cortes y refrendado por el pueblo catalán en 2006, para Mas "Cataluña tendrá que identificar dos o tres temas clave para su futuro e ir a por todas para que se hagan realidad". "Lo que no nos podrán decir es que gestionar los aeropuertos catalanes desde Cataluña o adoptar un concierto económico con el que Cataluña pueda gestionar sus propios recursos son temas que no caben en la Constitución", subrayó Mas.
Para Mas, no son suficientes las advertencias lanzadas en los últimos días por Montilla ante la posibilidad de que el Estatuto quede gravemente laminado: "Es urgente que en Cataluña se pase de las declaraciones a un plan de acción inmediato. No puede ser que cuando llegue la sentencia nos quedemos mirando a las musarañas". El mayor obstáculo que observa Mas para alcanzar un frente común en Cataluña es la dependencia del PSC al PSOE: en este sentido, ha tachado de "desconcertante" que mientras Montilla lanzaba su aviso al TC, Carme Chacón participaba en la "gran fiesta de exaltación de fraternidad socialista" junto a José Luis Rodríguez Zapatero.
de acuerdo Por su parte el viceprimer secretario del PSC, Miquel Iceta, reconoció que un eventual recorte del Estatut desgastaría tanto a los socialistas catalanes como al PSOE. Iceta también lanzó un mensaje a los políticos catalanes, recordándoles que la respuesta que desde Catalunya ante un eventual recorte debe ser "lo más unitaria posible". Aseguró que el PSC pondrá todo lo que esté de su parte para que así ocurra.
Finalmente el secretario general de ERC, Joan Ridao, afirmó que una sentencia adversa será una "fábrica de soberanistas", y que no será un fracaso del catalanismo sino de los principales partidos españoles por no encajar a Cataluña de una forma más flexible en España. Se mostró dispuesto a respaldar los planes de CiU, pero advirtió a Mas que no lo use como baza electoral.