Esta moción, consecuencia de una interpelación urgente debatida el pasado 28 de octubre, ha contado con los votos en contra de 172 diputados -entre otros PSOE, ERC e IU-ICV-, el apoyo de 159 parlamentarios y la abstención de otros 11, entre ellos los de CiU.

Se trata de la primera iniciativa parlamentaria que se debate después de la liberación del pesquero, secuestrado durante 47 días, y en ella se reclamaba también la adopción de medidas similares a aquellas implementadas por países del entorno, "al estilo de Francia", de modo que se embarcasen militares a bordo para proteger a los buques.

El diputado del PP Arsenio Fernández de Mesa, que se ha encargado de defender esta moción del Grupo Popular, ha puesto el acento en la "descoordinación absoluta", en los "informes contradictorios", en la "información en ocasiones falsa o no contrastada" y en la falta de atención adecuada ofrecida a las familias.

Se ha aquejado asimismo de que, según su interpretación, el Gobierno haya echado la culpa a los militares, "como si fueran unos inútiles", de no haber podido capturar a los secuestradores, lo que, a su juicio, es una "humillación intolerable".

Con esta moción, el PP aspiraba a aumentar el ámbito de la operación "Atalanta", que ahora no es suficiente para garantizar la seguridad de los barcos que faenan en el Índico. No ha querido pasar por alto las palabras pronunciadas ayer por la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, al sugerir que el Grupo Popular parecía estar al lado de los piratas.

Unas palabras "intolerables" e "inaceptables", según Fernández de Mesa, quien ha pedido una corrección a la vicepresidenta, de la que ha dicho que "tiene mala conciencia" porque "se considera una ministra completamente amortizada en un Gobierno completamente agotado".

A favor de la moción se ha manifestado el diputado del PNV José Ramón Beloki, para que los barcos puedan faenar en condiciones razonables de seguridad, y ha dicho que su grupo no se conforma con la solución "provisional y transitoria" de que los barcos lleven protección privada a bordo.

También el BNG se ha adherido a la propuesta del PP, aunque, según ha dejado claro su portavoz, Francisco Jorquera, el comportamiento del Partido Popular en plena crisis del secuestro, introduciendo "una tormenta política", fue "extraordinariamente irresponsable" y obedeció a criterios de ventajismo, oportunismo político y demagogia.

Contra la moción se ha expresado el diputado del PSOE Jesús Cuadrado, que ha reconocido que todos tienen que aprender lecciones de este caso y hacer autocrítica, aunque ha afeado la conducta del líder del PP, Mariano Rajoy, a quien ha reprochado que no se le haya notado su satisfacción por la liberación de los 36 marineros.

"Yo veo mucha irritación desde el minuto siguiente de la liberación", ha apreciado Cuadrado, quien ha calificado al PP con "un diez en broncas y un cero en propuestas". Para el portavoz de ERC, Joan Ridao, lo primero es que el Ejecutivo "aclare el abanico de interrogantes" planteados en este caso, por ejemplo cómo la detención de los dos piratas incrementó la tensión o sobre la coordinación "quizás poco eficiente" entre los ministerios implicados.

El portavoz de IU, Gaspar Llamazares, ha considerado que la iniciativa del PP destila "ira y rabia", así como "nostalgia neocolonialista", al tiempo que ha pedido tranquilidad para reflexionar y que el Gobierno ofrezca primero las explicaciones que debe sobre el secuestro. Llamazares también ha exigido explicaciones a los armadores, a las fuerzas políticas y a los medios de comunicación.

Además de CC, también se ha abstenido CiU, una postura que su diputado Jordi Jané ha argumentado en el hecho de que la moción del PP exige que se depuren responsabilidades por parte del Gobierno antes de conocer todas las explicaciones, aunque coincide con los "puntos cardinales" de la iniciativa.