30 de abril. Frontón Astelena de Eibar. 1.044 espectadores se reúnen en las gradas. Desde que se supo que Aitor Elordi se iba a cruzar con Jokin Altuna en el segundo encuentro de la liguilla de cuartos de final del Grupo A del Manomanista, la venta de asientos se lanzó hasta lograr una entrada de lo más jugosa. El partido no defraudó. 22-18 para el amezketarra, que levantó un 15-18 de un solo tirón. A dentelladas.

4 de junio. Frontón Bizkaia de Bilbao. 3.000 asientos. Mismo partido. La petición de localidades se disparó después de conocer que el guipuzcoano y el vizcaino se iban a encontrar en la cita cumbre del curso manista. Mano a mano desde el Everest. “Hemos notado mucho que la demanda se ha disparado con respecto al viernes”, disecciona Iñaxio Errandonea, director comercial de Aspe, promotora que firmó un pleno absoluto en las semifinales del campeonato; no en vano, a la presencia de los dos finalistas hay que sumar a Joseba Ezkurdia y Darío Gómez. Los cuatro serán cabezas de serie la próxima campaña. Si el Manomanista sigue por los mismos derroteros, la promotora de Eibar solo dispondrá de otros dos billetes para entrar en octavos. Los pupilos de Baiko, en cambio, empezarán de cero. “Hay una base de afición que, en cuanto se abrió a la venta –el 3 de mayo–, ocupó gran parte del aforo del frontón Bizkaia de Bilbao. Después, cada pelotari tiene sus propios seguidores. Se ha notado mucho la velocidad que ha tomado la venta”, especifica el exprofesional. 

“Aitor atrajo a mucha gente del entorno pelotazale en el partidazo que jugaron en el Astelena. El primer golpe ya se ha dado. Esta final ha generado ilusión”

De hecho, tal y como aseguró este lunes el propio Jokin Altuna, todas las reservas y compromisos de la gente cercana ya están agotados. Algunos de sus adeptos tuvieron que tirar de los portales de internet para encontrar acomodo en la cita de Miribilla. Y es que el tirón del amezketarra es innegable. En el retrovisor: once finales en la élite, tres de ellas dentro de la distancia. Ante Elordi disputará la cuarta de su carrera. En total: dos txapelas (2018 y 2021), el más laureado de los manistas en activo. El guipuzcoano es un pelotari con glamour y pedigrí. 

El año estelar del mallabitarra

El caso de su adversario es diferente. Lleva un curso de escándalo: tercero en el Cuatro y Medio, campeón del Parejas con Zabaleta y finalista del Manomanista. El verano de 2022 lo pasó entre primeros y terceros partidos. Desde Aspe destacan que sí hay un “efecto Elordi” en la afición. “Va a movilizar a la pelota vizcaina en toda su extensión”, certifica Errandonea, quien recuerda que “Aitor atrajo a mucha gente del entorno pelotazale en el partidazo que jugaron en el Astelena. El primer golpe ya se ha dado. Esta final ha generado ilusión”

“Aitor ha encajado bien con el público y lleva una buenísima campaña. En el Cuatro y Medio de 2021 se vio una gran mejoría en su juego. Completó una buena actuación –quedó apeado en cuartos de final, mas dio mucha guerra–, pero esta temporada ha dado un salto enorme”, analiza el director comercial de Aspe, quien añade que “ha sido la gran sorpresa para todos, incluso para la empresa. El mano a mano es quizás la distancia que más le ha costado. Este año ha dado un empujón. Lleva años en el campo profesional, aunque muchos pelotazales lo están descubriendo ahora. Siempre ha sido un pelotari bonito, pero estamos hablando de otra dimensión”. Es el número 1 del Ranking LEP.M.

A la empresa se le acumulan las complicaciones para confeccionar las combinaciones. Un delantero más en las quinielas. “Benditos problemas. Se nos retiró Irribarria y tener para elegir está muy bien. Elordi ha demostrado que está entre los mejores en las tres distancias”, apostilla. 

“Un pelotari que gusta”

El Parejas da el pistoletazo de salida a la venta de festivales estivales, pero el Manomanista los afianza. Errandonea relata que “Aitor es un pelotari que gusta. En el Parejas ha demostrado todo lo que juega. Elordi y Zabaleta han formado una gran combinación. Es un buen manista para esos partidos”.