La entrenadora del Kutxabank Araski, Madelén Urieta, analiza el estado anímico y físico de su equipo de cara a la Copa de la Reina. La preparadora alavesa espera por encima de todo que el equipo luche, pero que en especial disfrute de este regalo que es el torneo del KO en una temporada muy dura.
Después de mucho tiempo de espera, la Copa de la Reina ya está aquí. ¿Cuáles son las sensaciones?
Lo primero de todo y lo que mejor define nuestro ánimo es la palabra ilusión. Creo que el poder estar entre los ocho equipos que forman la Copa de la Reina es un regalo. Un hecho que no nos esperábamos a principio de temporada y es algo que se ha logrado con mucho esfuerzo en el día a día y aquí estamos. Es cierto que pilla muy tarde en el transcurso de la temporada, ya que otras veces sí suele celebrarse antes. Aunque eso sí, vamos con la misma ilusión de siempre y siendo conscientes de que va a ser muy complicado. Nosotras tenemos los pies en el suelo y vamos a ir con más ganas que nunca de competir durante los 40 minutos del partido.
Lo acaba de mencionar, este año la Copa se celebra muy tarde. ¿A quién beneficia?
–En este caso, yo creo que beneficia a los clubes grandes porque al final, ellos se preparan para estar en este momento de la temporada al 100% de su rendimiento. Mientras que el resto de equipos de mortales, por así decirlo, tenemos que hacer un esfuerzo muy grande. Por otro lado, ellas, además de tener una grandísima calidad, tienen más profundidad de banquillo y eso hace que puedan llegar más frescas a este tramo de la temporada. Incluso se pueden permitir el lujo, durante el transcurso del año, de dosificarse en algunos encuentros para poder rotar más y así llegar mejor a estos momentos importantes donde se está jugando todo, tanto a nivel de Euroliga como de Liga. En ese sentido, quizá nos perjudica un poco, pero eso no quita para que nosotras vayamos a ir allí con toda nuestra ilusión y llenas de energía. Además, somos conscientes de que podremos ver a nuestra gente de Vitoria allí y eso nos va a ayudar un montón. Y por otro lado, nosotras no jugamos doble competición y quizá para un equipo como Zaragoza que sí que lo hace y que no es de ese podium de equipos como Valencia, Perfumerías y Girona, quizá le pese un poco más y ojalá así sea.
¿Cómo se prepara este tramo final de temporada con la Copa de la Reina y los ‘play off’ tan seguidos?
Como si fuera ahora una pequeña pretemporada para llegar al final del curso de la mejor forma posible. Somos conscientes de que vamos a jugárnoslo todo en menos de un mes y prácticamente en 20 días va a estar zanjada la temporada. Y ojalá sea con un premio inesperado de estar entre los ocho primeros para disputar el play off. Ahora está en nuestra mano y no nos podemos olvidar de que justo después de la Copa tenemos un viaje muy complicado a La Seu, que es un equipo que cada vez está haciendo mejor las cosas y que es una cancha complicada para llevarse la victoria de ella y tendremos que estar centradas.
Los dos duelos anteriores ante el Zaragoza han sido igualados, ¿Qué se espera en ese encuentro?
Es verdad que los partidos han sido muy emocionantes y los dos con la misma tendencia de empezar con el Zaragoza ganando con solvencia por 17 puntos en Vitoria y por 15 en Zaragoza. Allí, además, perdimos con una canasta en el último segundo de la prórroga, pero ambos partidos han sido muy igualados y con muchas caras. Así que creo que vamos a poder vivir esa misma sensación en la Copa de la Reina, donde ellas tienen la presión añadida de jugar como anfitrionas y nosotras somos el patito feo, el equipo que nadie cree que va a conseguir ganar y ojalá demos la sorpresa y que no esté ya el guión establecido.
El Araski no tiene nada que perder este jueves. ¿Es así?
Al final, hay que saber gestionar la presión ante el error en un partido tan importante para ellas delante de toda su gente. Entonces, si conseguimos que no estén cómodas, por cada error suyo, creo que les va a suponer un poco más que a nosotras y esa gestión de las emociones va a ser fundamental en ese partido, donde nosotras tenemos que hacerlo valer. Aunque eso sí, sabemos que va a ser muy complicado porque el pabellón va a estar completamente lleno contra nosotras, pero eso también tiene que servir como motivación.
Una pena que el encuentro sea el jueves y no el viernes, ¿verdad?
Sí, es una pena, ya que hay mucha gente que nos ha dicho que no va a poder ir el jueves y que ojalá pasemos para llegar a las semifinales, porque tienen que trabajar el viernes. Es más, también sabemos que hay aficionados que van a ir, van a ver el partido y luego se van a volver a casa para trabajar el viernes en Vitoria. Entonces, estén allí o no, sabemos que nos van a acompañar, que los vamos a sentir y ojalá que acaben orgullosas de nosotras.
¿Cuáles son las claves del encuentro ante el Zaragoza?
Creo que lo primero es que ellas tienen una líder desde la posición de base como Mariona Ortiz que está dirigiendo muy bien al equipo y que está leyendo muy bien las ventajas para castigarlas. Además, está muy bien acompañada por una jugadora espectacular y muy talentosa como Fiebich, que además hacía mucho tiempo que no veíamos en la liga. Porque es una anotadora de todas las posiciones, te puede postear ya que es una jugadora grande, también te puede jugar cerca del aro, o te puede meter entradas e incluso triples. Una jugadora muy completa y determinante que me recuerda a las mejores estrellas de WNBA. Luego, tienen por dentro a Gatling, que normalmente en este tipo de partidos se hace muy determinante. Una pívot que cerca del aro es muy peligrosa, ya que tiene muy buenas manos y que sabe correr también a campo abierto. Es decir, tienen cuatro jugadoras determinantes y tampoco nos podemos olvidar de Gimeno. Ellas juegan mucho a crecer desde la defensa para intentar hacernos sentir incómodas en todo momento, por lo que a nosotras nos tocará defender al mismo nivel que ellas e igualar su nivel físico para poder tener opciones en el partido.
Cada vez que el Araski se ha clasificado para la Copa de la Reina o los ‘play off’, ha dejado buen sabor de boca. ¿Espera repetir ahora?
Sería increíble poder regalarles a nuestra gente una victoria y es que estas jugadoras se lo merecen. Yo solo pido poder disfrutar del partido y que no sea una derrota dura, sino que se pueda competir por el encuentro. Ese premio de llegar a unas semifinales de una Copa de la Reina contra el Estudiantes o el Valencia, para nosotras sería una final. El equipo se lo merece y ojalá pase.
¿Cómo llega el Araski a nivel físico?
El equipo está bien. Somos conscientes del esfuerzo que estamos haciendo y también de lo que nos queda por mejorar y por trabajar. En líneas generales, están todas contentas y concentradas. No pensamos en lo que ya ha pasado, porque no lo podemos cambiar y sí pensamos en lo que se puede hacer ahora para intentar ser mejores el día de mañana. Tenemos un partido complicado en la Copa y luego tres encuentros para terminar la temporada y necesitamos estar al 100% y que todas sumen. Esto es clave, el que todas sumen. Y es que hay días que quizá tengas que aportar en anotación, otros en rebotes o asistencias y hay otros días que quizá te toque sumar estando en el banquillo con una energía muy positiva para ayudar a quien esté bien en la pista. Y yo creo que esto lo tienen claro y lo intentan hacer cada día.
¿El estar entre los ocho primeros durante casi toda la temporada ayuda a nivel psicológico?
En una liga tan dura como la que estamos viviendo, el estar ahí arriba hace que las jugadoras, cuando acaben un partido, miren la clasificación, otros resultados y valoren y hagan sus cábalas. Eso hace que todas estén enchufadas y que realmente siempre haya objetivos, algo que es fundamental. Porque a veces cuando estás en la clasificación en tierra de nadie es como que no tienes esa motivación añadida, que ellas tienen en el día a día para intentar ser mejores.
¿Se atreve a pronosticar algún favorito para ganar la Copa?
Creo que el Perfumerías Avenida con el cambio de dinámica está bastante intocable. El Valencia, si recupera a las jugadoras que están lesionadas (Cristina Ouviña y Torrens), y aunque no estuvieran a velocidad de crucero, creo que se podrían plantar en la final y ya ahí podría pasar cualquier cosa entre esos dos equipos.
Siempre y cuando no se cuele el Araski en la final…
(Risas) Bueno ojalá. Ojalá podamos asomar la cabeza por ahí, pero somos realistas. Nosotras tenemos que ser ambiciosas, pero realistas. Creo que estos equipos están lejos de que les podamos ganar, pero es cierto que a un partido nunca se sabe y nosotras siempre vamos a intentar dar nuestra mejor versión.
Por otro lado, hacía tiempo que el Araski no transmitía unas sensaciones de equipo tan positivas.
El ambiente en el vestuario es muy bueno y eso se traduce a la pista. Además, eso beneficia para poder generar un feeling con nuestra grada y eso es muy importante y es algo que llevábamos tiempo buscando. El año pasado no lo conseguimos, pero este sí. Además, hay muchos momentos complicados de la temporada y ese buen ambiente hace que todo sea mucho más fácil y que te levantes más rápido de los malos momentos.
La “Marea Verde” está más volcada que nunca, ¿El equipo también lo notará?
Al final va todo de la mano. Nosotras somos conscientes de que tenemos la responsabilidad de darle un buen espectáculo a nuestra gente y que luego realmente quieran venir a verlo porque jugamos alegres y hay carácter sobre la pista. Eso se lo estamos dando y la gente está respondiendo bien porque es una hinchada muy fiel. Al final, estoy muy orgullosa de la afición que tenemos y también del equipo porque consigue que quieran repetir.
A buen seguro se les escuchará en Zaragoza.
Eso seguro, son fundamentales. Creo que el año pasado ya se echó de menos a nuestra afición en la Copa, ya que visten la grada de un color muy animado. Da igual que el Araski esté jugando o no, que se les oye igualmente y por eso creo que tenemos la mejor representación que podemos tener.
