Un derbi contra el Eibar no es como otro partido cualquiera. Si ha habido un antagonista en la historia reciente del Deportivo Alavés, desde que se descendió a Segunda B en 2009, ese ha sido el conjunto armero, con el que los babazorros han vivido batallas de todo tipo tanto en Ipurua como en Mendizorroza. Casi siempre, además, una y otra escuadra han competido por un objetivo en común, lo que ha aportado aún más épica si cabe.
En Segunda División, donde ambos se encuentran ahora, el Glorioso y el Eibar se han enfrentado un total de 24 veces. Ocho de ellas han caído del lado albiazul, siete han terminado en tablas y las nueve restantes han sido de los azulgranas. Un balance, por tanto, ligeramente negativo para los intereses gasteiztarras, pero al que se le va a poder dar la vuelta esta y la próxima semana, durante la primera ronda del play off de ascenso.
El primer duelo de la eliminatoria será en Ipurua y allí, en concreto, el Alavés ha sido capaz de ganar en cuatro ocasiones, de nuevo en referencia a los choques en la categoría de plata. La primera fue el 10 de enero de 1954, gracias al solitario tanto de Erezuma, y la última el 23 de abril de 2005, cuando las dianas de Bodipo y Nenê valieron tres puntos, el gol average y, prácticamente, medio ascenso a la élite. David Silva marcó para los locales (1-2).
En Mendizorroza, donde el balance no puede estar más equilibrado (4V-4E-4D), el primer triunfo (3-2) llegó el 26 de enero de 1958 por medio de los goles de Iborra, Hormaeche y Arbaizar. Para encontrar el último, por el contrario, no hay que remontarse tanto en el tiempo, pues ocurrió hace unos meses. El 4 de febrero, Asier Villalibre, quien debutaba con la zamarra albiazul, anotó los dos tantos de la victoria (2-0).
Ese derbi, en el que el Eibar tuvo que jugar más de media hora con un jugador menos por la expulsión de Sergio Álvarez, ha sido el que ha permitido al Alavés acabar cuarto la fase regular y, por consiguiente, contar con el factor campo en la primera ronda de la promoción de ascenso. Algo fundamental, sobre todo, por el hecho de que, en caso de empate, serán los gasteiztarras quienes pasen a la final sin necesidad de tanda de penaltis.
EN LA PRIMERA VUELTA...
Por último, cabe recordar que, en la primera vuelta, armeros y babazorros firmaron las tablas (0-0) en el bastión guipuzcoano. No hubo muchas ocasiones aquel día; a Stoichkov le anularon un gol por fuera de juego y, del lado babazorro, Jason y Guridi tuvieron los acercamientos más claros. Poco después llegaría, desgraciadamente, la mala racha del mes de diciembre.
