Tras superar con nota el último mes de enero, el Deportivo Alavés afronta la visita del Eibar a Mendizorroza como el momento clave para dar un golpe sobre la mesa y presentar su candidatura al ascenso. El conjunto de Luis García ha vuelto a erigirse como un claro aspirante a regresar a la máxima categoría a tenor de sus últimas actuaciones y el escenario para consagrarse entre los líderes llega ante el Eibar.

Un viejo conocido regresará a Mendizorroza en un duelo que se traduce como una final anticipada por ocupar la cúspide de la clasificación. Alaveses y guipuzcoanos, separados por cuatro puntos en la tabla, son dos entidades que se conocen al dedillo tras haber coincidido desde hace décadas en todas las categorías del fútbol nacional.

La rivalidad entre ambos contendientes es una realidad. Durante los últimos años tanto Eibar como Alavés han luchado por objetivos similares. En la máxima categoría la ferviente pelea era por mantener una plaza en Primera y, en esta ocasión, la pugna es por regresar a la élite del fútbol.

El Alavés se ha enfrentado al Eibar hasta en 42 partidos oficiales, un dato que esclarece uno de los motivos por los que Mendizorroza se convertirá en una caldera el próximo sábado. Además, el 33% de los duelos entre ambos se han saldado con triunfo albiazul, un claro síntoma de la igualdad que se respira entre los dos conjuntos.

El choque más reciente entre ambos concluyó con un empate sin goles en un enfrentamiento en el que el temor a caer derrotado se apoderó del ritmo del juego. En esta ocasión, sin embargo, el Alavés juega a su favor con el factor campo, ese que le ha llevado a ser casi imbatible en su territorio.

En esta ocasión, el Eibar llegará al choque ante el conjunto vitoriano inmerso en una excelente dinámica de resultados. El conjunto de Gaizka Garitano tan solo ha perdido uno de sus últimos diez partidos correspondientes al campeonato doméstico. Desde la derrota ante el Cartagena durante el mes de noviembre, los armeros suman 20 puntos de 24 posibles. Una cifra extraordinaria.

Ahora bien, los recientes precedentes entre ambas escuadras llaman al optimismo de la parroquia albiazul. Las últimas cinco ocasiones en las que el Eibar ha visitado el estadio del Paseo de Cervantes, el Glorioso ha caído en una de ellas, ha logrado dos triunfos y ha empatado en otros dos enfrentamientos. La igualdad entre gasteiztarras y eibarreses se ha repetido durante décadas y el duelo de este sábado apunta a desarrollarse por los mismos derroteros.