La prolongada precampaña y las dos semanas de periodo legal para que las formaciones solicitaran su apoyo a los ciudadanos han desembocado en la jornada electoral de hoy. Llega el momento de revelar la fotografía exacta que va a definir el panorama político para los próximos cuatro años en los 51 Ayuntamientos del territorio y las Juntas Generales de Álava. La decisión recae sobre los 252.377 electores alaveses que van a poder acercar se a alguna de las 427 mesas electorales, repartidas en 101 locales, y que servirá para designar 431 concejales y a los 51 representantes en el parlamento foral.

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En imágenes: DNA reúne a los candidatos forales alaveses en Mendizorroza Alex Larretxi

La macrocefalia que ejerce Gasteiz, donde residen tres de cada cuatro alaveses, se refleja en la composición de 27 concejales que integran el Pleno del Ayuntamiento. Es el más numeroso de los 51 que hoy se eligen y donde el panorama aparece más incierto según la catarata de encuestas y proyecciones de voto de las últimas semanas.

El apretado resultado de hace cuatro años, con únicamente 3.712 sufragios de diferencia entre las tres formaciones más votadas, PNV, PSE y EH Bildu, respectivamente, apunta a comprimirse hasta límites poco imaginables y terminar proclamando a la fuerza ganadora por un reducido puñado de votos. La maquinaria de campaña de los partidos ha trabajado intensamente esta semana final tratando de expandir su mensaje por todos los rincones de Gasteiz, a la caza y captura de esa amplia bolsa de electores indecisos y que pueden decantar la balanza hacia uno u otro lado.

Solo una cosa hay segura antes de la apasionante noche electoral. La capital alavesa contará por vez primera con la figura de una alcaldesa en la decimosegunda legislatura desde la restauración de la democracia. Cinco mujeres encabezan las candidaturas de las formaciones políticas que optan a repetir su presencia en el salón de Plenos. Beatriz Artolazabal (PNV), Maider Etxebarria (PSE-EE), Rocio Vitero (EH Bildu), Ainhoa Domaica (PP) y Garbiñe Ruiz (Elkarrekin). Una de ellas recogerá, el próximo sábado 17 de junio, la makila que le entregará el, a partir de hoy, alcalde en funciones, Gorka Urtaran.

El primer edil jeltzale durante los últimos ocho años no va a poder competir en las urnas optando a revalidar el histórico triunfo del PNV de 2019 y que sirvió a los nacionalistas para reconquistar Gasteiz después de dos décadas de gobiernos de otras formaciones y colores.

El pasado mes de octubre el máximo órgano rector de la formación jeltzale en Araba (ABB) decidió proponer a las bases la figura de Beatriz Artolazabal como candidata a la Alcaldía de Gasteiz. Los ocho años de Urtaran al frente de la institución, el desgaste derivado de proyectos de movilidad como la implantación del BEI y el colapso de tráfico en la zona sur de la capital llevaron a la formación nacionalista a renovar el puesto del cabeza de lista y, al mismo tiempo, colocar una figura femenina para estar en consonancia con los nuevos tiempos de paridad en la representación al más alto nivel.

La que fuera consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Gobierno Vasco y también diputada foral de Políticas Sociales, entre otros cargos, conoce la institución municipal de su paso como concejala, entre los años 2000 y 2007. Ejerció tareas en la oposición durante las legislaturas del popular Alfonso Alonso en la Alcaldía. Regresa Artolazabal a la actividad municipal 16 años después y va a tener como rivales políticas a las otras cuatro cabezas de cartel que conocen de primera mano todos los entresijos, temas y funcionamiento de la institución.

Pactos para la gobernabilidad

Junto a la certeza de contar con la primera alcaldesa, es también seguro que se volverá a tener que reeditar un gobierno de coalición para liderar el Ayuntamiento. El electorado gasteiztarra no concede mayorías absolutas desde hace más de tres décadas y los vaticinios para esta noche apuntan a que la fuerza ganadora puede rondar los siete u ocho concejales, seguidas a una mínima distancia de tres partidos que se moverán en la horquilla de cinco a siete asientos en el Pleno.

A partir de la fotografía final de esta madrugada empezarán las sumas y restas para que esa fórmula de coalición llegue a la mágica cifra de 14 votos. Eso garantiza la mayoría absoluta y permitiría afrontar una legislatura en la que llevar proyectos adelante sin el retraso y la tortura que supone el farragoso tramitar de cada iniciativa hasta lograr su aprobación. Desde el año 2016 PNV y PSE han desarrollado la fórmula de gobierno de coalición, aunque sin la mayoría absoluta, y los representantes jeltzales y socialistas han apuntado durante la campaña la idoneidad de poder repetir el esquema otros cuatro años más. Esa coalición PNV-PSE se ha manejado en la agonizante legislatura con 13 concejales encontrando respaldo en Elkarrekin Gasteiz a la hora de sacar adelante cuestiones esenciales como el Presupuesto de cada año o la aprobación inicial del nuevo Plan General.

Tercer mandato de González

Todas las estrecheces que se intuyen en la cerrada pugna por la Alcaldía parecen estar disipadas cuando se apunta a la Plaza de la Provincia. La Casa-Palacio espera solo recibir la confirmación de que será el jeltzale Ramiro González el que encadene un tercer mandato como diputado general de Álava y logrando algo que nadie ha hecho en la secular historia de la institución.

La gestión de estos ocho años y el contacto directo con todos los municipios, entidades y colectivos son el mejor aval en el trabajo de un Ramiro González, que todo apunta a que revalidará una cómoda victoria. Sin ser la mayoría absoluta, que otorgan 26 asientos de los 51 del salón de Plenos de las Juntas Generales, los vaticinios apuntan a la posibilidad de incrementar un representante más los 17 que ya tiene el PNV. Con un respaldo amplio y consolidado, como en el caso del Ayuntamiento, también el planteamiento de un gobierno de coalición con el PSE-EE de socio es la opción preferida y que también ha despertado más simpatías durante la campaña.

Lejos del epicentro que suponen el Ayuntamiento de Gasteiz y la Diputación de Álava están en juego otros 50 Consistorios del territorio donde también las diferentes fuerzas políticas están ante un tablero con resultados inciertos en algunas de las localidades más relevantes.

Llodio

Añibarro se mantiene

En el Valle de Ayala, el Ayuntamiento de Llodio es el segundo en relevancia del territorio, con un censo de 14.400 electores. El jeltzale Ander Añibarro está al frente desde hace cuatro años tras recuperar para el PNV el sillón de la Alcaldía. El estudio EITB Focus concedía a Añibarro la victoria, siendo el PNV la fuerza más votada con siete ediles. Sin embargo, augura un crecimiento de EH Bildu para pasar de cinco a seis concejales, mientras Omnia y sus tres representantes podrían ser la bisagra que decantara la makila para uno u otro lado. Además el PSE-EE espera completar la Corporación con un asiento.

Agurain

Una batalla cerrada

En la Llanada Alavesa las prospecciones apuntan a un posible intercambio de papeles entre PNV y EH Bildu, aunque, en todo caso, todo hace indicar que la identidad del primer edil de Agurain se resolverá por un puñado de votos. Los soberanistas crecerían de seis a siete ediles y un aumento en sufragios hasta el 46,3%. El camino inverso haría el PNV al dejarse un concejal y contentarse con la media docena tras perder un 3% de votos esta legislatura con la figura de Ernesto Sainz Lanchares como primer edil.

Laguardia

El PP busca su espacio

La principal población de Rioja Alavesa aguarda con interés el panorama que dejen las urnas. El jeltzale Raúl García ha ocupado la Alcaldía tras el acuerdo de hace cuatro años con PSE y EH Bildu. De esa manera se descabalgó al popular César García de Olano que fue la primera lista y más sufragios obtuvo.

Labastida

La importancia de pactar

El punto de consenso entre PNV y EH Bildu posibilitó en 2019 que Labastida haya tenido estos años a Laura Pérez Borinaga como alcaldesa. De esta manera también quedó apeado del cargo el popular Daniel García tras obtener el triunfo en las urnas. El PP repite con García como cabeza de cartel, mientras los jeltzales han renovado la lista con Miguel Barinaga y se completan las candidaturas con Leire Garbayo (EH Bildu) y Mari Mar Mantas (PSE).

Iruña Oka

El reducto socialista

El histórico y tradicional feudo socialista de Araba, único municipio donde gobierna el partido del puño y la rosa, se enfrenta a la reválida de saber cómo afronta su actual regidor, Mitxel Montes, el estreno como cabeza de cartel con el peso de la alargada sombra de seguir manteniendo el Ayuntamiento en poder de los socialistas. Montes accedió al cargo tras la tormentosa dimisión de Javier Martínez y serán sus rivales, la jeltzale Rosario Romero, la popular Ana Ortiz de Urbina, mientras que Davide di Paola lidera la lista de EH Bildu y Luz Guerrero la de Elkarrekin.

Los datos

Primera alcaldesa. Lo único seguro de las elecciones para conformar el nuevo Ayuntamiento de Gasteiz es que una mujer se convertirá en la primera alcaldesa de la capital.

Juntas Generales de Álava. Los 51 procuradores del parlamento foral se designan a través de las tres circunscripciones en las que se divide el territorio. Por Vitoria se eligen 39, cinco por Tierras Esparsas y 7 por Ayala.

Las cifras

431 concejales en Álava. Los 252.377 electores llamados a las urnas elegirán los representantes en 51 Ayuntamientos del territorio. Son dos representantes más que los 429 de hace cuatro años.

11 ediles en Legutio. Las variaciones en la población permiten a este Ayuntamiento ganar dos nuevos representantes en su salón de Plenos. También incrementan en dos concejales su Consistorio Arrazua-Ubarrundia y Valdegovía. Por el contrario, pierden dos Elciego y Yécora.

101 locales electorales en Álava. Se han dispuesto 427 mesas con 854 urnas en las que depositar las papeletas blancas para los Ayuntamientos y sepia de Juntas Generales. Además, hay instaladas 172 cabinas para que los electores diluciden su voto.

1.281 integrantes de las mesas. El sorteo del 2 de mayo determinó los presidentes y vocales de las mesas. Se eligieron también 2.562 suplentes. A las 8.00 de la mañana se han conformado y por el trabajo de toda la jornada serán remunerados con 70 euros.

65,2% participación hace cuatro años. Los anteriores comicios municipales y forales se saldaron con 163.727 alaveses que acudieron a depositar su voto. Ese índice fue cuatro décimas inferior al 65,65% del año 2015. La abstención en el año 2019 llegó al 34,74% lo que supuso que 87.155 votantes no se personaran ante las urnas.